¡Hola! Bienvenidos otra vez ^^.
Hoy les traigo una reseña de un libro que me he leído en dos días, lo cual es realmente emocionante porque llevaba meses con un bloqueo súper intenso. Y... no saben lo raro que es escribir una reseña después de casi un año de ausencia en el blog, pero bueno, vamos a ello.
Título: El beso del infierno.
Título original: White Hot kiss.
Trilogía: The dark elements #1
Número de páginas: 408
Autora: Jennifer L. Armentrout.
Sinopsis:
El primer beso podría ser el último.
Layla, de diecisiete años, solo quiere ser normal. Pero con un beso que mata a cualquiera que tenga alma, ella es cualquier cosa menos normal. Mitad demonio, mitad gárgola, Layla tiene habilidades que nadie más posee. Criada entre los Guardianes –una raza de gárgolas que tiene la misión de cazar demonios y mantener a la humanidad a salvo–, Layla intenta encontrar su lugar, pero eso significa esconder su lado oscuro de aquellos que más ama. Especialmente del atractivo Zayne, un Guardián de quien ha estado enamorada desde siempre.
Cuando menos se lo espera, Layla conoce a Roth, un demonio sexy y tatuado que dice saber todos sus secretos. Layla es consciente de que debería permanecer lejos de ese chico, pero hay algo que se lo impide… especialmente cuando se percata de que con él sus besos no son mortales, ya que Roth no tiene alma.
Pero en el momento en que Layla descubre que ella es la razón del violento levantamiento demoníaco, confiar en Roth no solo puede arruinar su oportunidad con Zayne… Podría convertirla en una traidora para su familia. Peor aún, podría llevarla a un viaje sin retorno al fin del mundo.
Los libros de esta autora son la clase de libros que me la paso posponiendo incontables veces hasta que un día sin venir a cuento acabo leyendo uno. Este es el primer libro suyo que leo pero la saga Lux ha estado en mis pendientes por más tiempo del que puedo contar. Por Twitter sólo leía maravillas sobre él, así que iba con las expectativas muy altas, sin embargo cuando empecé a investigarlo en Goodreads la cosa cambió mucho.
Por mi parte debo decir que es una lectura bastante atrapante, al menos para mí, la pluma de la autora es bastante sencilla y ágil, además de que me gustan las descripciones que hace. Sin embargo la historia peca mucho con el cliché, pero ya les hablaré de eso más adelante.
La historia es narrada por Layla, nuestra protagonista, ella es una especie de híbrido, mitad demonio mitad gárgola. Que después de haber sido abandonada en un hogar de acogida cuando era muy pequeña, fue adoptada por los Guardianes, un grupo de gárgolas que se encargan de mantener a salvo a la humanidad de los demonios. Eso hace que toda su vida sea una contradicción, puesto que ella ha sido criada como guardiana y de hecho los ayuda a cazar demonios, sin embargo una parte de ella es precisamente de esa raza. Layla tiene un problema muy grande, gracias a su naturaleza demoníaca, siente la necesidad de absorber almas. Por este motivo, nunca ha sido besada y siempre debe mantener una distancia prudencial de Zayne, quien no solo es su mejor amigo y el hijo del hombre que la ha criado, sino también su amor platónico. Sin embargo, cuando una serie de apariciones poco comunes de distintas especies de demonios empiezan, Layla conocerá a Roth, un demonio que la volverá totalmente loca y que, al no poseer un alma, le da luz verde para tener toda la cercanía que quiera. Además de que, este chico le hace algunas advertencias y supuestamente está allí para protegerla.
Bien, creo que este es un resumen bastante malo, pero de verdad que no sabía cómo hacerlo, estoy muy oxidada en esto. Además, me cuesta no soltar spoilers.
Debo decir que todo el asunto de las gárgolas es algo que me ha parecido bastante interesante, aunque tampoco es que se profundice mucho en ello, la verdad. Solo se nos cuenta que los Guardianes lo son y que para dormir y luchar toman su forma original, punto. La autora pudo explotar mucho más este recurso porque de verdad me hubiera gustado, sentí como si ella profundizase más en la parte de los demonios, que tampoco es malo. Solo debió haber un balance.
A mí me gustó el libro, como he dicho antes es tan fácil de leer que me lo he acabado en dos días, es atrapante. Especialmente porque hay muchos misterios en torno a Layla que deseamos conocer tanto como la protagonista, y como la historia la estamos viendo a través de sus ojos, las respuestas tardan en llegar. También tenemos las escenas de acción, que realmente le dan un punto interesante a la historia, cuando las cosas empezaban a ponerse pesadas y lentas, una buena escena de acción agilizaba mucho las cosas, especialmente hacia el final del libro, en el que el ritmo aumenta considerablemente.
Pero vamos a hablar de lo que no me gustó. Dos palabras: Triángulo amoroso.
*Suspiro exasperado* ¿Qué ganan los autores colocando un triángulo amoroso que desde el principio sabes con quien se va a quedar? Es algo que me molesta mucho, especialmente porque a mí el noventa por ciento del tiempo me gusta el tipo al que no escogen o es obvio que no escogerán y eso me frustra como no tienen una idea. Además es la misma fórmula repetitiva y cliché de siempre. Chica buena un tanto confundida con la vida que empieza a darse cuenta que quizás hay algo más allá y quiere explorar. Chico malo, que grita problemas por todos lados, es sumamente "sexy", saca de quicio a la protagonista y tiene el ego más alto que un rascacielos porque sabe lo bueno que está, pero eso sí, todo cambia cuando se enamora de la protagonista y siente como si fuera la primera vez que hace todo. Chico bueno, mejor amigo de la infancia de la protagonista, que es tan encantador que la confunde pero tampoco estamos seguros de sus sentimientos —¿Hola? Sarcasmo—, que además siempre está para protegerla y apoyarla y que tiene un lazo muy fuerte con ella. Bla, bla, bla. ¿Les suena? Pues sí, la gran mayoría de libros de ciertas autoras están cargadas de esto. Y no digo que esté mal, es solo que ya es cansino y predecible. ¿Todos sabemos con quién acaba, no?
Algo en lo que yo no me había fijado, pero después de leer un par de reseñas lo noté, es que los personajes son todos excesivamente perfectos. Lo juro, yo no me había dado cuenta de ello *risa avergonzada*, pero analizándolo bien, es verdad. En mi mini reseña de Goodreads digo abiertamente que soy #TeamZayne vamos, que a mí el tipo me gustó mucho. Pero sí es verdad que no tiene una personalidad definida, ni él ni nadie vamos a ser sinceros.
Los personajes secundarios son planos a más no poder, de eso sí me había dado cuenta. Los dos amigos normalitos de la protagonista aparecen una vez cada mil años, y solamente para tener unos diálogos tontos en los que el chico suelta algún "dato curioso" y la chica le recuerda a la protagonista que es virgen todo el tiempo, y que a ver si cambia eso pronto. Además de repetir hasta el cansancio que el chico nuevo Roth, está buenísimo y que ella ya le habría saltado encima. ¿De qué se trata?
Además, el uso de la palabra "zorra" como insulto hacia las chicas es bastante común, excesivo más bien. Creo que a todas las chicas de la historia se les llamó así al menos una vez, y sinceramente no lo entiendo. Especialmente no entiendo por qué toda la población femenina "odiaba" a Layla. ¿Querían darnos a entender que le tenían envidia o algo así? O como el asunto de Danika, la chica trataba relativamente bien a la protagonista —en lo poquísimo que interactúan—, pero de todos modos ella la odiaba porque estaba muy cerca de Zayne.
Layla tenía esta filosofía del primero yo, segundo yo y de último pues... yo. Se ponía celosa de su amigo Zayne y le reclamaba el acercamiento con esta chica, pero andaba en los brazos de Roth. ¿Hola? El mundo no gira a tu alrededor.
Y luego está Roth. Ash, ese tipo me cae tan mal. Pero es que tan sumamente mal. Nunca jamás toma nada en serio, se la pasa haciendo comentarios de índole sexual todo el tiempo, incluso en los momentos más tensos. Vamos, si estás en plena lucha donde podrían matarte, no vas a decirle a la protagonista lo buena que está. ¡Es ilógico! Quizás al final me haya conmovido un poco, pero tampoco fue la gran cosa. Yo es que no lo soporto. Normalmente los personajes que tienen un poquito de ego bien puesto me gustan, pero este no, este se pasaba. Además su romance con Layla es tan precipitado y se da prácticamente desde el primer segundo que resulta poco creíble. Juro que me la pasé todo el libro esperando que le dijera a Layla que todo había sido una mentira y que él la estaba utilizando y que todo era un plan suyo, pero no, porque el chico es súper bueno, a pesar de que es el heredero del infierno. ¿Eso fue spoiler? No, creo que no cuenta.
Creo que está muy marcado que la relación entre Layla y Zayne es del tipo romántico y la relación con Roth del tipo pasional. Con el primero todo es familiaridad, seguridad y estabilidad. Y con el segundo todo es novedad, locura y curiosidad. Quizás se entienda porque Layla no podía tener ese contacto con nadie más que con Roth y se haya dejado llevar, al menos yo quiero justificar así este insta love, que realmente me pone de nervios.
A mí me gusta el cliché de amigos de la infancia que se enamoran, es el mejor cliché ever... quizás por eso soy más team Zayne, y espero que tenga un poco más de protagonismo en el siguiente libro. Porque sí, voy a leerlo, ¿qué rayos pasa conmigo? No he dicho casi nada bueno y sigo pensando que me gustó (?)
Espero que no lo vuelvan malo o algo así, porque normalmente los escritores para enaltecer a un personaje nos hacen decepcionarnos del otro. Odio ese recurso, déjenlo ganar limpiamente.
Cuando estaba leyendo El beso del infierno, me sentía dentro de Corazón de Melón >|||<, Zayne era del tipo de Nathaniel y Roth era del tipo de Castiel. Yo en CDM juego por Nathaniel, así que...
Spoiler: De todos modos no le gusto a ninguno, qué sad.
Por mi parte debo decir que es una lectura bastante atrapante, al menos para mí, la pluma de la autora es bastante sencilla y ágil, además de que me gustan las descripciones que hace. Sin embargo la historia peca mucho con el cliché, pero ya les hablaré de eso más adelante.
La historia es narrada por Layla, nuestra protagonista, ella es una especie de híbrido, mitad demonio mitad gárgola. Que después de haber sido abandonada en un hogar de acogida cuando era muy pequeña, fue adoptada por los Guardianes, un grupo de gárgolas que se encargan de mantener a salvo a la humanidad de los demonios. Eso hace que toda su vida sea una contradicción, puesto que ella ha sido criada como guardiana y de hecho los ayuda a cazar demonios, sin embargo una parte de ella es precisamente de esa raza. Layla tiene un problema muy grande, gracias a su naturaleza demoníaca, siente la necesidad de absorber almas. Por este motivo, nunca ha sido besada y siempre debe mantener una distancia prudencial de Zayne, quien no solo es su mejor amigo y el hijo del hombre que la ha criado, sino también su amor platónico. Sin embargo, cuando una serie de apariciones poco comunes de distintas especies de demonios empiezan, Layla conocerá a Roth, un demonio que la volverá totalmente loca y que, al no poseer un alma, le da luz verde para tener toda la cercanía que quiera. Además de que, este chico le hace algunas advertencias y supuestamente está allí para protegerla.
Bien, creo que este es un resumen bastante malo, pero de verdad que no sabía cómo hacerlo, estoy muy oxidada en esto. Además, me cuesta no soltar spoilers.
Debo decir que todo el asunto de las gárgolas es algo que me ha parecido bastante interesante, aunque tampoco es que se profundice mucho en ello, la verdad. Solo se nos cuenta que los Guardianes lo son y que para dormir y luchar toman su forma original, punto. La autora pudo explotar mucho más este recurso porque de verdad me hubiera gustado, sentí como si ella profundizase más en la parte de los demonios, que tampoco es malo. Solo debió haber un balance.
A mí me gustó el libro, como he dicho antes es tan fácil de leer que me lo he acabado en dos días, es atrapante. Especialmente porque hay muchos misterios en torno a Layla que deseamos conocer tanto como la protagonista, y como la historia la estamos viendo a través de sus ojos, las respuestas tardan en llegar. También tenemos las escenas de acción, que realmente le dan un punto interesante a la historia, cuando las cosas empezaban a ponerse pesadas y lentas, una buena escena de acción agilizaba mucho las cosas, especialmente hacia el final del libro, en el que el ritmo aumenta considerablemente.
Pero vamos a hablar de lo que no me gustó. Dos palabras: Triángulo amoroso.
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| Como pienso que imaginan al tipo malo todas las que se mueren por él. |
Algo en lo que yo no me había fijado, pero después de leer un par de reseñas lo noté, es que los personajes son todos excesivamente perfectos. Lo juro, yo no me había dado cuenta de ello *risa avergonzada*, pero analizándolo bien, es verdad. En mi mini reseña de Goodreads digo abiertamente que soy #TeamZayne vamos, que a mí el tipo me gustó mucho. Pero sí es verdad que no tiene una personalidad definida, ni él ni nadie vamos a ser sinceros.
Los personajes secundarios son planos a más no poder, de eso sí me había dado cuenta. Los dos amigos normalitos de la protagonista aparecen una vez cada mil años, y solamente para tener unos diálogos tontos en los que el chico suelta algún "dato curioso" y la chica le recuerda a la protagonista que es virgen todo el tiempo, y que a ver si cambia eso pronto. Además de repetir hasta el cansancio que el chico nuevo Roth, está buenísimo y que ella ya le habría saltado encima. ¿De qué se trata?
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| Stacey, la mejor amiga, cada vez que ve a Roth. Descripción gráfica. |
Además, el uso de la palabra "zorra" como insulto hacia las chicas es bastante común, excesivo más bien. Creo que a todas las chicas de la historia se les llamó así al menos una vez, y sinceramente no lo entiendo. Especialmente no entiendo por qué toda la población femenina "odiaba" a Layla. ¿Querían darnos a entender que le tenían envidia o algo así? O como el asunto de Danika, la chica trataba relativamente bien a la protagonista —en lo poquísimo que interactúan—, pero de todos modos ella la odiaba porque estaba muy cerca de Zayne.
Layla tenía esta filosofía del primero yo, segundo yo y de último pues... yo. Se ponía celosa de su amigo Zayne y le reclamaba el acercamiento con esta chica, pero andaba en los brazos de Roth. ¿Hola? El mundo no gira a tu alrededor.
Y luego está Roth. Ash, ese tipo me cae tan mal. Pero es que tan sumamente mal. Nunca jamás toma nada en serio, se la pasa haciendo comentarios de índole sexual todo el tiempo, incluso en los momentos más tensos. Vamos, si estás en plena lucha donde podrían matarte, no vas a decirle a la protagonista lo buena que está. ¡Es ilógico! Quizás al final me haya conmovido un poco, pero tampoco fue la gran cosa. Yo es que no lo soporto. Normalmente los personajes que tienen un poquito de ego bien puesto me gustan, pero este no, este se pasaba. Además su romance con Layla es tan precipitado y se da prácticamente desde el primer segundo que resulta poco creíble. Juro que me la pasé todo el libro esperando que le dijera a Layla que todo había sido una mentira y que él la estaba utilizando y que todo era un plan suyo, pero no, porque el chico es súper bueno, a pesar de que es el heredero del infierno. ¿Eso fue spoiler? No, creo que no cuenta.
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| Yo cada que Roth abría la boca. |
Creo que está muy marcado que la relación entre Layla y Zayne es del tipo romántico y la relación con Roth del tipo pasional. Con el primero todo es familiaridad, seguridad y estabilidad. Y con el segundo todo es novedad, locura y curiosidad. Quizás se entienda porque Layla no podía tener ese contacto con nadie más que con Roth y se haya dejado llevar, al menos yo quiero justificar así este insta love, que realmente me pone de nervios.
A mí me gusta el cliché de amigos de la infancia que se enamoran, es el mejor cliché ever... quizás por eso soy más team Zayne, y espero que tenga un poco más de protagonismo en el siguiente libro. Porque sí, voy a leerlo, ¿qué rayos pasa conmigo? No he dicho casi nada bueno y sigo pensando que me gustó (?)
Espero que no lo vuelvan malo o algo así, porque normalmente los escritores para enaltecer a un personaje nos hacen decepcionarnos del otro. Odio ese recurso, déjenlo ganar limpiamente.
Cuando estaba leyendo El beso del infierno, me sentía dentro de Corazón de Melón >|||<, Zayne era del tipo de Nathaniel y Roth era del tipo de Castiel. Yo en CDM juego por Nathaniel, así que...
Gracias por leerme ^^.
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Nos leemos pronto :)
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